Andanzas de un montaraz (por Andhur)

Nombre: Ethanor.

Cultura/raza: Montaraz.

Profesión: Sastre, chapucero y posiblemente carpintero.

Altura: 1,90 m.

Peso: 85 kilos.

Pelo/ojos: Negro/verdes.

Género/edad: Varón/30 años.

Conducta: Noble, estricto, desconfiado e introvertido al principio con los q no conoce. Daría la vida por salvar a los desvalidos. Amigo de sus amigos. Verdugo de sus enemigos.

Motivación: Enmendar los errores de sus antepasados y ayudar a destruir el mal de Mordor. Reunificar las Tierras del Norte y ayudar a erradicar el mal y las injusticias que en ellas ha existido tras su caida.

Deidad: Estë.

Clases: Explorador.



Historia:



Poco se sabe del lugar donde habitan los llamados montaraces. Una raza casi extinta, pero pura. Descendientes de Elros, primer rey de los Hombres.

Ethanor es uno de ellos, un montaraz del norte, nómada como sus antepasados, pues el reino de Arnor era demasiado grande para ser habitado por la menguada raza de los Dunedain tras la Gran batalla en las puertas de Mordor, donde la ultima alianza de Elfos y humanos acabo con el poder de Sauron.

La vida no le ha sido fácil, siempre entre sombras, sin un lugar fijo donde habitar, ni el calor de un hogar… Siempre solo.

Conocedor de las leyendas e historias de sus antepasados, viaja por la Tierra Media tratando de hacer el bien, con la única esperanza de que el poder de Sauron no vuelva a anegar de oscuridad el mundo que conocemos.

Su aspecto descuidado y sus ropajes, y sobre todo esconder siempre su rostro ante los desconocidos, hacen albergar temor en los corazones de los habitantes de los pueblos del norte…

Pero bajo ese aspecto, Ethanor ansia por encima de todo poder redimir los errores de sus antepasados. No le importan las riquezas ni el poder, pues sabe que eso fue lo que destruyó a su pueblo, llevando a la locura a Ar-Pharazôn y odia sobremanera a Sauron, pues con sus argucias llevo al último rey a la ruina, y junto a él a Andor, la Tierra del Don, regalo a Eärendil.

Cuando llegue el momento y si todavía las fuerzas se lo permiten, pues la duración de la vida de los Edain no es sino un reflejo de lo que fue, descargará su ira sobre el enemigo y no conocerá la piedad ante los seguidores de Sauron.



Todo comenzo una mañana soleada, de un precioso dia de verano, que la sangre del padre de Ethanor tiño de rojo escarlata...

El muchacho vivia en una cabaña, en un bosque cerca de Fornost, situado en el reino de Arnor. El gran reino que fue se habia convertido en un puñado de feudos y señorios gobernados para el enriquecimiento de sus señores. Solo unos pocos siguen teniendo la sangre de los antiguos dunledinos que moraron Andor y entre ellos su padre...

La muerte de su padre fue sin duda lo que marco su vida y le convirtio en un solitario, la misma muerte que le hace desconfiar de la raza humana, odiando a bandidos, ladrones y tiranos. a los que inflige el castigo impuesto por su propia brujula moral.

Antes de ese dia la vida de ambos transcurria como cualquier otro dia. Habia sido criado por su padre, llamado Elathorn, pues su madre habia muerto al dar a luz, una sombra de culpabilidad que lo persiguio en sus primeros años de vida. Fue enseñado en las artes de la caza, aprendiendo a rastrear animales, pero tambien a respetarlos y belar por su seguridad ante cazadores furtivos. Tambien fue entrenado en el combate, las artes curativas, la creacion de flechas basicas y la sastreria, asi como todo lo necesario para sobrevivir de la naturaleza, sin dañarla. Conocimientos todos adquiridos de un montaraz, aunque no lo supo hasta aquel fatidico dia.

En efecto su padre lo era, igual que su abuelo, y su el abuelo de este; conocimientos transmitidos de generacion en generacion, cuya verdad iba a ser revelada cuando Ethanor cumpliera los 16 años, como hizo su abuelo con su padre. Pero ese dia se adelanto, y por circunstancias que uno jamas espera.

La cabaña estaba situada en un pequeño risco, en una zona bastante inaccesible dentro del bosque, un lugar en el que el sonido del arroyo que discurria en las cercanias, y el de los animales que en el habitaban amenizaban la solitaria vida de ambos.

Jamas habia tenido contacto con nadie que no fuera su padre... hasta ese dia, en el que por cosas del destino encontraron un joven halcon con una flecha clavada en un ala. Y fue Ethanor quien trato las heridas del animal alli mismo, mientras su padre trataba de encontrar a los cazadores. Pero Ethanor deberia haber vuelto a la cabaña con el Halcon como su padre le habia ordenado y habe permanecido en ella hasta que el volviera... mas no llego, pues fue sorprendido por los furtivos que lo rodearon. Eran 5 hombres con ropajes viejos y de aspecto poco cuidado, a los que no habia oido llegar por su preocupacion por el halcon. Le hicieron varias preguntas a las que no contesto y le pidieron la pieza que llevaba en sus brazos; a lo que tambien se nego.

Sintio la mano de uno ellos en su rostro, y de su labio broto sangre, y la sangre siempre llama a la sangre, y asi fue que tras el golpe, el furtivo cayo al suelo con una flecha clavada en su corazon. Otro de ellos caia por otro flechazo al tiempo que Ethanor era capturado por el que parecia el jefe, quien insto a Elathorn a salir de donde estuviera y depusiera las armas. Y salio, pero con el arco tensado y apuntando al furtivo que amenazaba el cuello de Ethanor con su espada corta, mientras los otros dos furtivos apuntaban con sendos arcos a Elathorn. Y la decision que tomo fue la unica que sabia que daria el tiempo suficiente a Ethanor para escapar. Y al tiempo que gritaba "Corre" Ethanor vio como su asaltante caia por el impacto en la frente de otra flecha, mientras veia como su padre era tambien derribado por los dos furtivos que quedaban... y corrio, corrio, corrio cuanto pudo perseguido por los dos furtivos, que corrian detras de el confiados en perseguir a un chiquillo asustado e inofensivo. Mas no estaban del todo equivocados, pues estaba muy asustado, pero la rabia que corria por sus venas y las enseñanzas de su padre, no le convertian en alguien inofensivo. Y dio nuerte a sus perseguidores utilizando las artes del sigilo y asi se convirtio en un solitario montaraz, pues volvio a buscar a su padre, que yacia moribundo y por el que no se podia hacer ya nada, y le dijo con su ultimo aliento lo que era...

Y este dia cambio el caracter del joven, terminando antes de tiempo sus dias de juventud, pues crecio de golpe y se volvio receloso y desconfiado, mas no por ello dejo de tener gran corazon, ni perdio la nobleza y modales que su padre le habia inculcado, ni dejo de tender la mano a los necesitados en sus multiples viajes. Y por primera vez piso Bree, y coincidio con los ataques de los huargos... Casualidad?... O algo lo empujo alli justo en ese momento...